INTERESES DEL ESTADO O REINO.
En los viajes de un explorador los intereses eran personales para seguir obteniendo conocimientos sobre la naturaleza que había en las regiones de América, así como de las plantas, de las regiones, de la gente que las habitaba en ellas y continuar con el progreso de la ciencia, pero los objetivos y las ambiciones por parte del gobierno eran las riquezas porque para ellos los materiales eran importantes como en el caso de América del Norte, el principal interés fue extraer las piedras preciosas que había en ese lugar; por ejemplo los viajes organizados a Luisiana, Bernard de la Harpe y el geómetra Dumont de Montigny partieron en 1720 a la búsqueda de la roca de esmeralda, situada, según las indicaciones de los indios, cerca del río Arkansas. Otro ejemplo más fue en Canadá donde el colono La Vérendyre y sus hijos obtienen en 1738 el apoyo del gobernador Beauharnais para sus proyectos de expedición hacia el Misuri con el sueño de las riquezas que aportaría al rey de Francia con el descubrimiento de minas preciosas en el noroeste canadiense. Por último está el ejemplo del comercio de los materiales que transportaban de América del Norte, Alaska con las pieles.
INTERESES DE LOS VIAJEROS NATURALISTAS.
En esa época en España al realizarse los viajes, los españoles acompañaban a sus exploradores para así también participar en sus investigaciones y cuidar sus campañas. Como ejemplo de ello el francés U. Dombey, se le negaba su viaje si no aceptaba que lo acompañaran dos jóvenes botánicos para presenciar sus exploraciones porque con los viajes que se realizaban el explorador hacía sus contribuciones científicas para su país.
En la misión de un explorador debe haber en él curiosidades, conocimientos y ambiciones, el doctor en medicina Peisonnel fue enviado a las costas de Berberìa para investigar las plantas y las flores para que sus observaciones contribuyeran para la Historia Natural, M. George Foster hizo viajes por Holanda, Francia e Inglaterra y su gusto por la herborización hizo que acompañara a Cook en su segundo viaje donde su contribución fue la de dar una dirección específica o los planes de viaje, Mungo Park quien estudió medicina su interés fue sobre la botánica y gracias a su cuñado hace que tenga contacto con Banks quien le consiguió un trabajo de ayudante cirujano y así consigue una misión para explorar a África.
Para las expediciones que se dieron es esa época se requería de más innovaciones y fue gracias a los astrónomos y a los matemáticos que diseñaron los relojes cronométricos y fue así que se pudo calcular con exactitud la longitud y en las regiones por explorar y descubrir estaba el interés de la filosofía porque ya empezaban a cuestionarse sobre el origen del hombre. (cf. Bouguert Maria Noëlle, Arasse D., Vovelle Michel, 1995, pág. 280-283).
Más tarde se envían estudiosos a explorar los lugares más lejanos del mundo y conforme el tiempo transcurre más estudiosos están preparados para viajar y realizar sus observaciones como lo fueron los exploradores, geógrafos, políticos que contaban con mapas y globos terrestres para viajar y con base a este material solo imaginaban sobre esas líneas trazadas sus viajes y también imaginaban su partida hacia el conocimiento.
En los años 1740 y 1750 se vivió un momento de recuperación en cuanto a los estudios sobre la naturaleza americana, dentro de los proyectos estaban la explotación y producción de los recursos naturales americanos, ya que el recurso principal económico para la colonia era explotar los metales preciosos y como prioridad estaba en obtener el oro y la plata; pero por cuestiones de deudas y crisis periódicas de inflación, la Monarquía tuvo que explotar otros recursos además de los metales preciosos como las materias primas , aunque las plantas del nuevo mundo especialmente las medicinales y textiles fue de gran interés para los políticos y para el año de 1777 la Historia Natural empezó a recibir apoyo institucional sobre todo España, se fundó el gabinete de Historia Natural en Madrid y en ese año se llevó a cabo una expedición botánica en los países de Chile y Perú. (cf. Juan Pimentel, 1ª. Edición 2001, págs. 74, 81).
La exploración en el pacífico era por medio de instrucciones escritas por el rey que indicaba las regiones que debían de explorar los navegantes, principalmente en las costeras americanas y asiáticas y también escribía una lista de lo que debían realizar los médicos, naturistas y estudiosos. Al darse la tarea de explorar los mares se descubrió el mar del oeste por el jesuita Francois-Xavier de Charlevoix en el año de 1720, dicha investigación duró tres años y quienes lo acompañaron en el transcurso del viaje fueron canadienses e indígenas. En el año de 1975, James Mack escocés al servicio de España, envió a John Evans a explorar el continente americano pidiéndole que en su diario escribiera en una sección llamándola Historia Natural sobre sus observaciones en las regiones que exploraba. (cf. Bouguert Maria Noëlle, Arasse D., Vovelle Michel, 1995, pág. 80).
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